MARGARITAS A LOS PÁJAROS: una visión a vuelo de ave de la ganadora del Oscar



No vi Birdman. Tampoco está en mis planes de comprar un balde de pochoclos, una gaseosa mediana y meterme a verla. Y ojo que he ido a ver películas de cine-arte pero solamente porque Philip Morris regalaba dos entradas, un baldecito de pochoclo y dos gaseosas de 600ml al canjear 20 marquillas (no fumo, así que las encontraba en la calle o se las pedía a mis amigos fumadores). De esa forma, oh paradojas, me terminé fumando Dogville, ese provocador adefesio de Lars Von Trier, un tipo que se cree muy piola haciendo una película como Ninfómanas, donde los actores se cepillan de verdad.